El mito del genio y algunas conclusiones sobre la creatividad

Einstein

Hace un tiempo atrás inicié una serie de posts sobre la creatividad y sus mitos. En el primero de ellos discutimos el mito del la creatividad como fruto del pensamiento inconciente. En el segundo, el rol de la experiencia previa. Y en el tercero, en qué medida la creatividad es innata o se adquiere.

Este post es el último de esta serie. Discute un último mito y pasa en limpio algunas conclusiones finales.

La creatividad y el mito del componente innato

Brain storm

Siguiendo con esta serie de posts sobre la creatividad, en esta ocasión quiero hablar sobre un tercer mito: la difundida creencia respecto de que existe una predisposición innata que determina nuestra posibilidad de crear.

Por un lado, hay muchas personas que piensan de sí mismas: -«Yo no soy creativo» o «Yo no nací creativo».

En el extremo opuesto, está la idea de quede cualquiera puede, mediante la simple aplicación de algunas técnicas, aprender creatividad como aprende quien costura o ikebana, desmintiendo todo aspecto innato de la capacidad creadora. Esta visión es también muy difundida y uno de sus principales exponentes es Edward De Bono.

La creatividad y el mito del «Eureka!»

Romper el molde

Siguiendo con esta serie de posts sobre la creatividad, en esta ocasión quiero hablar sobre un segundo mito. Este está emparentado con el anterior en la medida en que también supone que las ideas novedosas llegan repentinamente. Pero en este caso lo que quiero discutir es el rol de nuestra experiencia previa en el «salto», la imagen de «la lamparita» encendiéndose sobre nuestra cabeza en una suerte de ruptura repentina con nuestro conocimiento pasado.

Consideremos los siguientes problemas:

1) Ayer, antes de dormir, apagué la luz y me metí en la cama. Mi cama está a seis metros del interruptor; y sin embargo, logré llegar a la cama antes de que la habitación quedara a oscuras. Como es eso posible?

2) Juan y su hijo Martín de 8 años salen en auto desde Buenos Aires hacia Mar del Plata. En el camino sufren un terrible accidente, donde el padre muere y el niño queda seriamente herido. Ante la imposibilidad de tratar sus heridas en el lugar del accidente, deciden trasladarlo de nuevo a Buenos Aires para ser operado por la mayor eminencia en ese tipo de cirugías. Cuando el niño llega a la sala de operaciones, los médicos del lugar le presentan el caso y esperan ansiosos su opinión.

Finalmente, uno de los médicos le pregunta: –¿Cree que podrá salvar al nene?

Y obtiene la siguiente respuesta: –¡Haré todo lo que pueda… Él es mi hijo!

Este tipo de problemas parece resolverse de repente. Si nos mantenemos atados a nuestra experiencia previa, todo parece indicar que la situación es imposible. Pero el problema estriba en dejar de lado supuestos implícitos que provienen precisamente de nuestro conocimiento pasado.

La creatividad y el mito del inconsciente

brain clouds

Hace muchos años atrás, en las épocas de la Fundación Iniciativa de la que hablé en este post, me dediqué bastante tiempo a investigar el tema y dar talleres sobre Creatividad a chicos y chicas de colegio secundario. Este es un tema que me encanta y sobre el que sin embargo casi no he vuelto a trabajar en mucho tiempo.

Yo creo que ser creativos en nuestra vida cotidiana es algo sumamente útil y a la vez hace que disfrutemos más de lo que hacemos. Es aplicable además a casi cualquier campo en el que nos movamos. Así que quiero compartir acá algunas de las ideas más importantes de cuando me dedicaba a este tema.