Creer y saber

07-09-2010

Hace rato que Ramiro Ferrer está entre los comentaristas más habituales del blog. Y es una suerte porque sus aportes siempre son agudos y provocadores, pero a la vez respetuosos incluso cuando otros se ponen más bravos. Creo que un ejemplo excelente fue la discusión que se armó hace tiempo en torno a la llegada del hombre a la Luna. Allí, Ramiro se animó a plantear que no existían pruebas suficientemente sólidas y una multitud se le vino encima.

Lo interesante es que yo estoy seguro de que, si tiene que jugársela, Ramiro cree que el hombre SÍ fue a la Luna. Ese no era el punto de su argumentación sino si tenemos que creer acríticamente en eso, aún frente a pruebas insuficientes. En el debate se metieron entre otros grossos como Santi Siri y Old Ben, y si no lo siguieron en su momento les cuento que fue apasionante y los invito a que lo lean. ¡Era difícil sostener la postura escéptica en ese contexto y para mí él se la «re-bancó»!

Hoy Ramiro escribe su primer post invitado, volviendo sobre el tema subyancente al debate anterior: la diferencia entre la creencia y el conocimiento.

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Yo he tenido desde siempre una habitual costumbre de cuestionar –y cuestionarme- buena parte de todo lo que se da por sabido, por existente, por real. Con el paso de los años, esa costumbre comenzó a generarme roces y conflictos con otras personas, probablemente porque yo mismo empecé a ser menos sutil con mi crítica a ese modelo cognitivo donde si algo no es especialmente sospechoso, entonces puede ser verdad. Ya no hago muchas concesiones al discutir, y eso sube el tono de la conversación. Ese nivel de roce con quienes discuto refuerza mi pensamiento sobre la resistencia que ofrecemos a someter nuestro saber a un escrutinio más profundo y filoso.

No puedo decir que conozca mucha gente que, ante cualquier duda razonable, proponga poner en tela de juicio lo que cree y lo que sabe al respecto. Las personas acostumbran polarizarse entre quienes están seguros de que lo que creen es verdad, y quienes están dispuestos a hacer muchas preguntas, sin importar qué consecuencias tenga (que son la minoría).

Estas situaciones me hacen pensar respecto del método normal de incorporar información: suele replantearse poco –o nada- aquello que ya ha sido dado por verdadero. Si ya lo aceptamos y creímos, se saca de la mesa de debate y no se cuestiona más su validez; pasa a ser una verdad.
Es entonces cuando el proceso de “creer” toma protagonismo. Creer que se sabe; creer que lo que se sabe es válido y no amerita verificación; creer que lo que consideramos verdad, lo es; y no solo lo es para nosotros, sino para el resto del mundo.

Si prestamos atención a cómo hablamos, la palabra “creer” aparecerá muy seguido; tanto o más que la palabra “saber”. Y la diferencia semántica entre esas palabras es enorme. “Creer” implica un acto de confianza en algo que no necesariamente está comprobado, y “saber” es una declaración de certeza mucho más firme. Sin embargo, las cosas se complican si profundizamos aún más. También el “saber” comienza a ser una creencia en cuanto miramos con más detalle los pilares que lo sostienen. Y no encontraremos ningún pilar sin agujeros, sin puntos flojos, sin alguna fractura. Así, el saber es una versión más verificada del creer, pero con muchas de sus mismas debilidades. Creemos que sabemos, y ese saber es también una creencia.

Resulta muy difícil replantearnos y poner a prueba todo lo que pensamos, creemos y sabemos. Podría hasta resultar enloquecedor y paranoide (de hecho, es de ese mismo lugar que sale la falaz chicana intelectual “conspiranoide” para referirse a quien dice ver alguna mano oscura detrás de eventos importantes) Pero, el precio de no preguntarse nada, de dar todo por válido y cierto, es que terminamos viviendo en una ficción donde no podemos aferrarnos a nada, puesto que no sabemos si es verdad o no, si existe o no. Podrá ser agradable, cómodo y reluciente, pero vivir sin cuestionarse nada es vivir una historia contada por otros; una ficción; un adormecimiento intelectual; una anestesia de la mente.

Yo propongo un término medio entre la creencia brutal y la sospecha brutal; un punto en donde nada se dé por valido sin un análisis mínimo. Donde si algo no parece estar correcto luego de una primera evaluación, no se le apruebe el ingreso a nuestro catálogo de conocimientos. Donde recordemos que casi todo lo que sucede tiene un motivo, y que ese motivo muchas veces no está a la vista, o incluso está escondido mientras se muestra un substituto. Donde, si elegimos creer, lo hagamos después de saber, y ese saber tenga tantas certezas como podamos conseguirle.

Foto: Ian Parkes

43 Comentarios

    1. En principio no me creas nada; mejor investigalo y sacá tus propias conclusiones! 🙂

      El huevo, claramente, aunque también hay debate del bueno al respecto.

      Dioses sí que no acepto. Los misterios de la fe no son para mí. 🙂

      Saludos!

  1. Totalmente de acuerdo, y la verdad que es asi, hay gente que cree todo lo que ve, y esto se puede ver en la gente que mira los noticieros, y mucha TV, les llenan la cabeza con lo que quieren.

    @Augusto Yo digo que el huevo primero, ya que siguiendo la teoria de la evolucion el momento en que se producen los cambios biologicos es en el periodo de gestacion por lo que probablemente la gallina haya nacido de un huevo (que no fue un huevo de gallina sino de algun animal casi identico a una gallina que fue evolucionando). Asique la gallina salio de un huevo que no fue de gallina. Medio complicado pero es lo que creo.

    1. Como humanos estamos muy acostumbrados a creer en lo que vemos, y a descreer de lo que no vemos, con la excepción notable de la religión.

      De alguna forma, el desafío del conocimiento es ese.

      Saludos!

  2. Muy de acuerdo.
    Estoy leyendo un libro interesante, dentro de los argumentos a su hipótesis (del libro) es precisamente este planteo.
    El libro se llama El Cisne Negro, de Nassim Nicholas Taleb. «El impacto de lo altamente improbable».
    Gran parte de estudiosos, técnicos, especialistas en diferentes materias, dan por verdad absoluta determinada circunstancia. Y ante la aparición de estos hechos, se observa toda una adaptación de la realidad para que el nuevo estado sea aceptado racionalmente.

  3. «vivir sin cuestionarse nada es vivir una historia contada por otros»… quien pudiera saber todo para no tener que creerle a tanta gente. Creo que la clave está en poder intuir que y a quién creerle o no. Pero definitivamente cuestionar las cosas nos ayuda a entender y a ser nosotros mismos. Muy buen post!

    1. Ante la imposibilidad más absoluta de saberlo todo, saber tanto como se pueda de aquello que nos sirve saber es casi la única cosa que podemos hacer al respecto. Y parte elemental de la aproximación al saber es separar la información del medio y de la ideología, cosa no muy sencilla.

      Saludos!

  4. Excelente post !

    Comparto muchisimo esos pensamientos, aunque cuando decis:

    «Es entonces cuando el proceso de “creer” toma protagonismo. Creer que se sabe; creer que lo que se sabe es válido y no amerita verificación;»

    personalmente modificaria la palabra verificacion por refutacion, por que tampoco creo que se pueda dar un paso del creer al saber por medio de la verificacion (por lo menos un paso minimamente concluyente)

    Un saludo grande,

    1. Quizá estoy un poco acostumbrado al método científico y algunas cosas del amigo Popper, donde verificar y refutar son cosas no solo muy diferentes sino que muchas veces puede ser posible una y no la otra. También me parece bueno refutar como alternativa.

      Saludos!

  5. Yo respeto mucho a las personas que justamente se replantean ó autoplantean cosas y dan espacio a un mutuo intercambio de opiniones hasta llegar a un verdad propia pero con fundamento, lo que decís Santiago respecto a la polarización, es verdad, incluso en nuestro país a nivel político sucede y mucho, ó estás de un lado ó del otro, pero creo hay poco análisis objetivo para tomar buenas decisiones que a largo plazo nos perjudican. De todas las personas que yo creo que «saben» ó he aprendido, me dí cuenta que poseen un alto backup de ideas fundamentadas desde la lógica ó por la simple experiencia que tienen en el área. saludos!

    1. La política debe ser uno de los ejemplos más groseros de qué tan poco fundamentado puede estar un pensamiento/conocimiento. De hecho, buena parte de todo lo que se hace en nombre de la política son falacias descaradas, con enormes costos sociales, y donde el objetivo que se persigue es ganarle al oponente con el argumento que sea.

      Saludos!

      1. el sistema de creecias se llama idologias,que seria asi como tener en la cabeza un conocimiento desformado,que surge de las condiciones reales de un modo de producciony de esas relaciones sociales que brotan de el en la cual hay que incluir el conocimiento,el conocimiento es manejado por la clase empoderada de las fuerzas de produccion o sea la clase dominante hoy burguesia que se apodera tambien de la cultura y qu por medio de los aparatos del estado la escuela iglecias etc deforma el significado de los conocimientos

    1. Qué es un hecho sino una creencia a la que, en condiciones muy poco variables, no se le ha encontrado aún algo que la descalifique? La historia de la humanidad está bañada en hechos que luego dejaron de serlo. La filosofía viene sufriendo esa curiosa dualidad desde hace milenios.

      Saludos!

  6. La experiencia me demostró que frente a muchos problemas, el verbo mas adecuado no es «creer» o «saber», sino «estimar».
    Muchas veces nos enfrentamos a situaciones donde no se puede saber, porque hay variables desconocidas y/o datos insuficientes. Y en esto nos incluímos a nosotros mismos, porque no está garantizado que lo que suponemos «saber» sea no solo válido, sino útil.
    Por eso siempre recuerdo a un Profe del Secundario que nos repetía que lo importante no era tanto «saber» sino TENER CRITERIO a la hora de enfrentar algo. Y para poder estimar con criterio, «saber» es solo una fracción del tema. También está lo que me permito llamar Fe, que no es la fe religiosa, sino la confianza en que uno es capaz de enfrentar un desafío, que lo que se tiene enfrente se puede resolver, que incluso aunque uno no pueda hacerlo y sus ideas fallen, tiene solución.
    La nota de Ramiro es correcta racionalmente hablando, lástima que falta esa Fe. Muchas veces fuí testigo y parte de logros que se explican por ese lado, donde «saber» fué importante exactamente en los términos que Ramiro escribe, pero no fué la clave, solo parte del proceso. Por ese lado entiendo puede verse lo de la «polarización», ya que para mucha gente no hay una fundamentación racional acerca de lo que piensa, opina y hace: muchas veces solo hay Fe, y ojo que no hablo de gente iletrada porque todos podemos caer en esa, a cualquier nivel.
    Respecto de la discusión acerca de la llegada a la Luna, por lo que ví de ese debate el problema justamente no es de datos, sino de criterio. En materia de opiniones no podemos exigir mirar las cosas como un ingeniero, pero además analizamos el tema con nuestros ojos y ese logro se hizo con una mentalidad de hace 40 años, que ya no existe. Si les interesa esta visión, está más detallada en http://axxon.com.ar/rev/198/c-198ensayo1.htm

    1. Me parece interesante que menciones la estimación como otro nivel de acercamiento a esa verdad esquiva que quizá ni siquiera exista en su forma más pura. Algo así como que el hombre sabio sabe que no sabe, entonces todo podría ser sin que nada lo sea completamente.

      Ciertamente, no soy un hombre de fe, y eso sin dudas que afecta mi modo de pensar. Aunque sin confundir la fe con el entusiasmo o la chispa interior, por supuesto. Quizá en los 60’s hubiera una energía diferente, un zeitgeist diferente que hiciera posible otras cosas que hoy se han perdido;no lo sé, no había nacido aún.

      Es muy bueno el ensayo que compartiste; pienso que podría estar de acuerdo con casi todo lo que ahí se postula. Gracias!

      Saludos!

      1. Ramiro, gracias por la respuesta ^-^
        «Todo podría ser sin que nada lo sea completamente»… En mi caso prefiero una frase de Buckminster Fuller: «Realidad debería escribirse entre comillas».
        Entiendo que todo «es» en sí mismo, el problema es nuestra percepción, somos seres finitos, en esa finitud estamos limitados. Podemos medir, incluso comprender el 99,9999% de algo pero siempre habrá un margen de incertidumbre. En ingeniería me enseñaban que si ese margen es muy pequeño se lo ignoraba y ya, luego en muchos escenarios (incluída la ingeniería) aprendí a tenerle respeto.
        En ese sentido el llegar a la Luna fué un desafío titánico a multitud de incertidumbres, ese fué el logro de una generación previa. Quizá este debate señale el desafío que nos toque a nosotros.
        Un abrazo

  7. Comparto! es bueno cuestionar y preguntar para aprender.Siguiendo el titulado del blog en muchas ocasiones esto lleva implicito el riesgo a quedar en ridiculo o generar empatia, pero la recompensa es haberse permitido pensar y aprender cosas nuevas. Lamentablemente no todos estan preparados para romper paradigmas. Para esto tambien es bueno aceptar la opnion ajena y no cuestionar sin sentido.

    Una duda, en la foto del perfil te estas sosteniendo la cara o es de intelectual?

    1. Siempre que optamos por comunicarle a otros nuestro punto de vista diferente arriesgamos algo. A la vez, decir que estamos de acuerdo cuando no lo estamos es uno de los pilares de las relaciones humanas, aún cuando eso claramente sea un error que se agranda con cada repetición. La empatía generada por ese modo no podría decir si realmente existe o es una fantasía que dura mientras ambas partes la sostengan. En lo personal, prefiero la dureza de una palabra honesta que la inconsistencia del que prefiere nunca contrariarnos.

      Lo de la foto quisiera «creer» que era que me estaba sosteniendo la cara, dejando la eventualidad del intelecto para otros vehículos más sofisticados 🙂

      Saludos!

  8. El creer, dudar o elegir reflexionar acerca de algo, tambien tiene que ver con un ahorro de energía. Las personas tienden a clasificar la información y las decisiones que toman con respecto a ella en función de si requiere o no un análisis según su escala de valores.
    La decisión tomada o la opinion definida, forma parte de la eficiencia de nuestro sistema de pensamiento. Si contrastara, aunque sea, el 10% de la información externa que recibo con la informacion interna que poseo, estaría toda mi vida pensando. Por eso, convencer es un negocio… digo para eso existe el Marketing. Y las ideas tambien se venden.

  9. Sin ninguna duda, primero vino la gallina. Qué sentido tendría que al inventarse «la gallina» se hubiera inventado en en su etapa «prenatal»?

    No lo creo…lo SE!

    1. Yo no estaría tan seguro de que no haya ninguna duda. La gallina que hacés mención tuvo que haber nacido de un animal diferente (puesto que fue la primera gallina) El huevo de ese animal, con alguna modificación genética apropiada para poder llamar gallina a lo que emerja del cascarón, no era un huevo de gallina aún: era un huevo de otro animal, pero que contenía la primer gallina.
      Si una gallina comienza a serlo a partir del primer huevo que la contenga, entonces la gallina, como tal, no puede existir *antes* que el huevo gallináceo primigenio del cual proviene. 🙂

      No lo sé, pero quizá lo creo. 🙂

      Saludos!

    1. Muy buena esa cita!

      Verificando tanto como podamos se achica la incertidumbre, cosa aún más importante en esta era tan mental que estamos viviendo, donde lo corporal, lo mecánico, lo visible, forman cada día una parte menor de nuestra existencia.

      Saludos!

  10. Ramiro, confieso que en algún párrafo me perdí, pero no porque seas farragoso escribiendo sino que es un tema tan amplio y complicado como el Universo. Recuerdo el añorado póster de la oficina de Fox Mulder en X-Files que decía »Quiero creer», habrá que cambiarlo por el »Quiero saber» ?
    Estoy de acuerdo con tu concepto de »quiero saber para poder luego creer» aunque entiendo que hay algo muy noble y maravilloso en eso de creer en algo sin haberlo visto jamás (te lo dice una atea, que no por serlo voy a negar lo maravilloso de la fe).
    Pero para temas mas terrenales como la ciencia, la sociedad, la actualidad y demás, creo que es elemental informarse para luego decidir, y siempre (SIEMPRE) dejar un resquicio para la duda y para poder discutir con otros que no están de acuerdo. No creer en nada y ver siempre en todo una mano conspirativa mas que una posición tozuda creo que es una posición cómoda: cuando no crees en nada no movés un dedo, porque sentís que no vale la pena, entonces para muchos es fantástico cuestionar todo, así no se tienen que arremangar y defender una postura (de mas esta decir que es mas fácil atacar que defender).
    Excelente post, Ramiro!

    1. Hola Raquel! «Farragoso»! Esa es una palabra elegante! 🙂

      Coincido en que hay algo maravilloso, mágico, sorprendente, en el hecho de creer. Somos contadores de historias por naturaleza, y una historia solo puede ser maravillosa en tanto creamos en ella. La mitología coexiste con la ciencia, y le da un sabor a la vida que no hay ecuación matemática que iguale.
      Es en los aspectos más prácticos, más mundanos, donde me parece que hay que aplicar con más intensidad el conocimiento como tal.

      Creer en todo y no creer en nada es el mismo escenario; no hay contrastes entre las posibilidades, entonces todas lo son y ninguna lo es. Se es en la diferencia, en el no-ser, en los contrarios y en los complementos. No existe nada si no puede diferenciárselo de otra cosa.

      Gracias por tu rico comentario!

      Saludos!

  11. De verdad que dices cosas muy ciertas, quizas lo unico que me hubiera gustado mas seria cambiar la frace «la diferencia entre la creencia y el conocimiento» por las similitudes entre la creencia y el conocimiento 🙂

  12. Santiago, cuando la mision Apolo fue a la luna dejaron espejos

    A esos espejos se les puede disparar un laser, el cual va a ser reflejado de vuelta a la tierra, demostrando que si hubo gente ahi, y que dejo esos espejos.

    Este detalle a sido ampliamente expuesto por los debunkers de teorias conspirativas, y hasta salio en un episodio de TBBT, pero por alguna razon los fanaticos de la conspiracion nunca mencionan esto.

  13. quizas es una mala manera mia de expresarme.. pero la mayoria de las veces aunque estoy segura de una idea siempre antepongo la palabra «creo» mas que «se» a mi me ha dado un toque de confianza entre la gente que conozco..

  14. parami como minimo hay dos formas de creer creer con pruevas evidencias etc y la otra es creer sin nada que corrovore estas

  15. Creer es, me parece ,creo que…., un «primer paso» hacia el conocimiento simple de las cosas , en base a lo que comúnmente se entiende o se tiene por válido . Saber es conocer la realidad directa de lo acontecido o la naturaleza de las cosas tras haberlo verificado desde una fase crítica previa , mediante procedimientos de la Ciencia , ya sea una análisis químico , una vista al microscopio ,etc, o conste en un libro de ciencia . Creemos en lo que nos dice una persona que tiene conocimientos adecuados al asunto y nos parecen correcto y no contradice a lo racional ni lógico ni a la ciencia . Entonces ya podemos decir «sabemos» . Las «creencias» son fáciles de asumir y conocer y son la salida de la ignorancia de que todos partimos , hacia los conocimientos , para luego en otra escala de certeza avalada por las Ciencias , en que podemos decir «sabemos» . Así , la Humanidad vivió durante milenios en ambiente de «creencias»…..y errores , como aquello de que la Tierra era plana y estaba quieta en el centro y quieta . Actualmente los Negacionistas niegan la verdad evidente , empírica ; pero en aquellos tiempos ancestrales «creían con exceso de confianza en verdades que no lo eran , con lo que yo les llamaría «los creyentesistas» o cosa similar ; creían en lo no cierto o presunta verdad . Entonces…..aquellos—conocían el agua y la sal , pero….no sabían lo que eran….y ahora sabemos que son H20 y ClNa .

  16. Humberto justo
    La diferencia entre el creer y el saber radica en que si se actúa en base a lo se cree pues lo mas seguro es que nos equivoquemos en la mayoría de las actuaciones. por consiguiente si se procede o se actúa en base a lo que sabe pues el resultado es el esperado, porque el saber son experiencias de otros y de uno mismo.

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