¿Carpe Diem? Viviendo cada día como si no fuera el último

11-01-2010

carpe diem

Hace unas semanas, Ángel «Java» López me dedicó via Twitter un post llamado «Carpe Diem, aprovecha y goza el día», donde él discute la célebre escena de Robin Williams en «La sociedad de los poetas muertos» en que el profesor les recuerda a los alumnos que nuestra vida es breve y les enseña a «disfrutar el día» (en español, acá). (Nota: si hay alguien TAN joven que no ha visto la película, le recomiendo que deje ya mismo lo que sea que esté haciendo, se vaya a un videoclub y la vea hoy mismo!)

En ésta época del año en que la mayoría estamos haciendo balance y tomándonos unos minutos para repensar nuestors rumbos, quiero dedicar un post a discutir la idea de «aprovechar el día» y su versión hermana, «vivir cada día como si fuera el último».

Aquí voy a argumentar la postura opuesta a la del post de Ángel y del «Profesor Keating». Lo hago, no con el ánimo de polemizar, sino de promover una discusión filosófica sobre cómo vivir los días que nos quedan de una manera provechosa y gratificante.

Este es un mundo donde la mayoría nos la pasamos corriendo a toda velocidad sin un rumbo. Malgastando los días, persiguiendo metas ilusorias e impulsados por nuestra propia negación omnipotente de la finitud de la vida. En un contexto así, pareciera que recordarle a todo el mundo el «Carpe diem» es una buena idea, y posiblemente lo sea. Tiene poco sentido que nuestro tiempo se escape mientras estamos siempre con el foco puesto en la postergación, en la obtención de metas distantes que nunca llegan. Así, la gratificacion sistemáticamente escasea, y el «Carpe diem» puede ayudarnos a recuperar cierto balance perdido.

Pero esta idea al pie de la letra es también peligrosa. Hay una frase que dice «vive cada día como si fuera el último, porque algún día, sin duda, estarás en lo correcto». Pero esa frase olvida que, muy probablemente, ¡antes de ese día habrás errado decenas de miles de veces!

Me tomo la licencia de ser un tanto «literal» para marcar el punto: imagínense por un minuto que supieran que mañana es el último día de sus vidas y piensen qué harían con ese día. Casi con seguridad sería un día horrible, dedicado a ordenar asuntos pendientes y a despedidas entre lágrimas. ¿Queremos vivir cada día como si fuera el último?

Sí, ya sé. La idea de «como si fuera el último» no se refiere a despedirnos sino a enfocarnos en hacer aquello que nos gusta y nos gratifica a corto plazo, «como si no hubiera un mañana». Pero… ¿qué cosas gratificantes se pueden hacer que se inicien y concluyan en un sólo día? Charlar con amigos, jugar a la Wii, tomar solcito en la plaza… Imaginen su último día bajo esta nueva lógica. ¿Queremos vivir cada día como este día?

Hay dos palabras en inglés de difícil traducción que expresan para mí los adjetivos que quisiera sentir respecto de mi propia vida: estos son «fulfilling» y «meaningful».

«Fulfilling» tiene que ver con la sensación de gratificación asociada a alcanzar aquello que uno se propone, sea lo que sea que uno se haya propuesto.

«Meaningful» tiene que ver con la sensación subjetiva de tener un «sentido», un propósito que va más allá de nosotros mismos.

La trampa reside en que muchas de las cosas que son «fulfilling» (nos gratifican a corto plazo), nos hacen sentir vacíos desde el punto de vista del «meaning». Las cosas «meaningful» (significativas) no se construyen de un día para el otro. No pueden hacerse sin un horizonte más largoplacista en el que pensemos nuestra felicidad como algo intertemporal, más que como algo inmediato.

Con muchos de los hábitos saludables pasa lo mismo. Si la vida es finita, ¿dormimos menos? ¿No dormimos nada? ¿Comemos hamburguesa de Burger King (o la comida poco saludable de tu preferencia) todos los días hasta que el colesterol nos desborde por las orejas? Mi problema con el «Carpe diem» es que subraya hasta el exceso la realidad de nuestra finitud.

Encontrar un balance entre el «fulfilling» y el «meaningful es un arte difícil. Pero lograrlo, a mi modo de ver, nace de no olvidar el «Carpe», pero reemplazar «diem» (día) por «vitam» (vida).

En conclusión, el punto que quiero marcar es que es un sinsentido vivir nuestra vida como si fuera eterna, pero no es menos absurdo vivirla como si la muerte fuera inminente (aún cuando lo sea). La vida es como una película que nadie sabe cuando termina. Pero no tiene sentido por eso hacer que, por las dudas, cada momento sea como un final, por si justo «la peli» termina en ese momento.

Hay que vivir teniendo presente la muerte, pero vivir atemorizados e influenciados por su inminencia nos debilita. En el fondo, parafraseando a Lennon cuando dijo que «la vida es eso que nos pasa mientras estamos ocupados haciendo otras cosas», yo creo que lo ideal es que apliquemos esa misma filosofía a la muerte: que nos agarre viviendo, sintiéndonos haciendo otras cosas, entretenidos, no luchando contra ella.

Foto: Nicola Adriano

50 Comentarios

  1. Excelente post. Has puesto en brillantes palabras uno de los planteos filosóficos que siempre tuve: justamente, el casi sinsentido del «carpe diem».
    Quiero que la muerte me sorprenda con una infinidad de proyectos inconclusos, sintiéndome más vivo que nunca. Si no fuese así, si al momento de exhalar mi último aliento ya tuviese todo «resuelto», sin dudas estaría muerto hace rato!
    Carpe vitam para vos también, Santi, y un fuerte abrazo. Nos vemos!

  2. Impecable reflexión. Siempre hubo algo que no me ‘cerraba’ de la filosofía del «Carpe Diem», pero nunca logre expresar de forma clara que era. Ahora ya tengo a quien «robarle» la explicación 🙂

    Sigo tu blog con entusiasmo, muy bueno!

    Saludos,

    Pablo

  3. Muy buena reflexión. En particular rescato la relación entre fulfulling y meaningful ya que es necesario disfrutar tanto el proceso como el resultado y actualmente pudiera parecer que el vértigo de la velocidad en la que nos sumimos propone continuamente la búsqueda de atajos para llegar al resultado sin pasar por el proceso o bien, delegándolo en otro.
    La propuesta de pensar en carpe vitam es una idea fresca que rescata la idea de disfrutar el proceso tanto como el resultado: las vacaciones no empiezan cuando tocás la arena de la playa, comienzan en el momento de cerrar la puerta de tu casa.
    Abrazo

  4. Santi, es una de mis películas preferidas. Y ahora la frase que escribiste «Carpe vitam» tiene más sentido o es más acorde a la vida. Es cierto, muchas cosas interesantes son a largo plazo. El amor de un día no lo quiero. Quiero poder despertarme con con mi marido y no llorar porque ese sería el último día, aunque sabemos que habla de disfrutar ese día, pero sería conformista y no lo soy…
    Quiero planificar vacaciones, viajes, paseos. Quiero decirle a mis sobrinos: mañana te paso a buscar para ir a la plaza.
    Y si sólo disfruto el día como si fuera el último, sólo tendría que hacer lo que realmente más me apasiona… Cómo podría decir qué es realmente… Entonces me pasaría el día sufriendo y pensando en cuál de todas las cosas que me gustan tendría que aprovechar ese supuesto último día.
    Los niveles de colesterol, triglicéridos, azúcar en la sangre y tantas cosas malas, incrementarían cada día debido a que me comería algo que me fascina sin importar si es saludable o no…
    Gracias por esta frase nueva para mi vida, me gusta mucho más.
    Besotes!

  5. siempre pense lo mismo pero «no podia ser correcto» porque la frase mundial y filosoficamenet «correcta» era «CARPE DIEM», estaba olvidando algo que me enseño una profesora de Sociologia que tuve en la secundaria hara unos 5 años, nos enseño a quitar ese efecto fijador de la sociedad, de «las cosas son como son por algo», desnaturalizar lo que sucede y pensarlo objetivamente con la posibildad de refutarlo y probar lo contrario… Creo que este post hace eso con «CARPE DIEM» por «CARPE VITAM»… muchas gracias por recordarme indirectamente ese gran mensaje que me dejo aquella profesora del secundario 🙂

  6. Excelente post 🙂 Concuerdo totalmente con que el extremismo negativo de vivir cada día como si mañana fueses a morir no es más que eso: un extremo. Sí creo en disfrutar y exprimir cada día en el sentido de no dejar de lado las cosas que nos gustan o por ejemplo, aunque suene cursi o a cliché, tampoco dejar de expresar nuestro cariño a nuestra familia o amigos. Esas son las cosas para las cuales me parece bien «aprovechar el día» y no en un extremo como se presenta en muchas películas. Si ves, o quizas ya viste «Antes de partir», vas a ver que se presenta un concepto similar: ante la conciencia de que te vas a morir haces una lista de cosas que te hubiese gustado hacer y las haces. Vivir cada día de esa manera, de forma cortoplacista. Eso no me parece bien, es un extremo y hay pocas situaciones en las que me gustan los extremos. Generalmente no tan profundas como esta reflexión. Tampoco me gusta la otra punta, planear miles de cosas pero no concretar ninguna. Creo, en lo personal, que encontrar el balance entre ambas cosas es lo mejor.
    Muchas gracias por tu reflexión Santiago y por invitarnos a dedicar unos minutos a hacernos estas preguntas.
    Saludos,
    Juan

  7. Concuerdo plenamente con vos, lo vertiginoso de vivir «el último día» es contraproducente. Los términos que usaste son exactos, la satisfacción a largo plazo prima por sobre la satisfacción inmediata de «tomarme una coca con hielo».

    Prefiero toda la vida una vida coherentemente planeada, sin perder de vista que la vida es una sola y que en algún momento va a terminar.

  8. Santi
    Desde hace mucho tengo debajo del vidrio de mi escritorio una frase que dice: «El futuro ni depende enteramente de nosotros ni tampoco nos es totalmente ajeno, de modo que no debemos esperarlo como si hubiera de venir infaliblemente ni tampoco desesperarnos como si no hubiera de venir nunca» (Carta a Meneceo, Epicuro).
    Esa es la filosofía con la que empiezo cada uno de mis días, ni apurada porque puede ser el último, ni confiada en que quedan miles por venir…
    Coincido con lo que se dijo más arriba, «quiero que la muerte me sorprenda con una infinidad de proyectos inconclusos, sintiéndome más vivo que nunca» =)
    Un abrazo
    Laura

  9. Interesante entrada. Aprovechando la anglo-onomatopeya y el sentido de tu post, creo que para integrar la visión tuya con la de Angel «Java» López habría que agregar al Fulfilling y al Meaningful el Mindfulness (http://en.wikipedia.org/wiki/Mindfulness).

    Cada ser humano es único. Único por lo que trae consigo. Único por las influencias que recibe del medio (familiar, social, cultural). Estoy convencido de que la plenitud de la vida acontece cuando la persona se conecta con su: genio. No es casualidad que genio y gen tengan la misma etimología. Ambos vienen a significar lo que es de cada uno en el más esencial y profundo sentido. Conectarse con es genio que llevamos dentro, es encontrar al Ser en cada uno. Pienso humildemente que ello es posible si logramos trascender la barreras de nuestro propio ego, pero para lograrlo debemos vivir circunstancias muy particulares como accidentes o momentos clave en la vida de uno o practicar (con la más profunda seriedad) alguna psico-tecnología atencional como es la meditación en cualquiera de sus formas. Allí emerge en Mindfullness desde el cual el fulfilling y al meaningful afloran libres de todo esfuerzo.

    Tal vez sea difícil de entender esto. Si querés comprenderlo cabalmente, te invito a ese maravilloso viaje que supone ir al encuentro de uno mismo, de ese Ser haciendo en el haSer que intenta cumplir ese sueño socrático del «Conocete a ti mismo» y que sólo puede alcanzarse cuando la mente está activamente en silencio.

    Un abrazo

  10. Lo que hago personalmente es preguntarme todas las mañanas si soy felíz haciendo lo que estoy haciendo. Es importante tener la meta pero también es igual de importante que te haga felíz recorrer el camino.
    Recorrer el camino solo por la meta que promete puede ser un gran error, la mayoría de los caminos que he recorrido no me han llevado al objetivo que me había propuesto originalmente. Sin embargo siento que avanzo y que mientras lo hago soy felíz… 🙂

  11. Coincido con Laura en la actitud de búsqueda de equilibrio. Me parece que como heurística para vivir cada día carpe diem se queda corta. No todos los días son iguales, los proyectos avanzan, nos hacemos viejos, perdemos un amor, encontramos un amor, estamos más cerca de puerto, nos acercamos a las estrellas. Los asuntos importantes de nuestra vida en gral. duran más de un día.
    También me ocurre, que ciertas acciones vitales las postergo, asumiendo que quedan otros días. También es cierto que muchas personas se pasan 280 días en un box deprimente y 15 días bajo la sombrilla recuperándose. En estos casos la recomendación de carpe diem tendría más sentido. Para no postergar demasiado asuntos vitales pendientes ni un día más. Y para decidirse (si fuera posible) a encontrar una actividad (trabajo) a la que vamos casi todos los días de la que no necesitemos escaparnos. Saludos, Mariano

  12. Debo confesar que «la sociedad…» me decepciono en su momento, tenia un monton de expectativas y me fui medio triston del cine. Sse lo atribuyo a dos falencias: ciertos esquematismos de guion, y Robin NanonanoWilliams.
    Pero yendo al punto, lo dificil es el equilibrio, como en todo. Irse a los palos es una papa, lo complicado es, como Aristoteles, buscar el justo medio de las cosas. Ni a c##$% que se acaba el mundo, ni a vivir pensando en el futuro, en metas y trascendencia sin vivir el dia a dia.
    No? 😉

    PS: sorry por la ausencia de tildes, etc. se me taro la maquina.

  13. Aca hay un súper partidario de los proyectos a medio y largo plazo. Pero tomo el carpe diem como un no dejar de disfrutar el día: no hacerme problema por cosas que en realidad no importa, no enojarme con seres queridos (o desconocidos) por peleas que no valen la pena dejar de querernos, y concederme al menos un ratito de recreción, donde demostrarme un poco de cariño a mi mismo y a mis cercanos. En resumen, no dejar de ser feliz por boludeces, mantener en foco en lo que a mi criterio es importante, y siempre mirando hacia adelante.
    Me enfoco en aprender (cosa que nunca es útil a corto plazo), pero nunca sin disfrutar. Tengo la suerte de estudiar temas que me apasionan, y de poder trabajar en un trabajo que también disfruto por las posibilidades que me da.
    Obviamente me como una amargura o una bronca de vez en cuando, pero creo que buscar un aprovechamiento integral de la vida vale la pena: a largo, medio, y excesivamente corto plazo.

  14. Coincido que es mucho mas ambicioso , cualitativo y «meaningfull» el carpe vitam, pero tambie, que el «carpe diem» en el caso de la pelicula y en muchos otros vale como una provocacon, un «detonador», para gente o casos en que estan muy estancados en algo, que no avanzan o tienen miedo a lo que pasara, al que diran, a las estructuras, a la opinion de los demas, etc. Con mas razon seria aplicable el «vitam» pero de esa forma con el «diem» se pone un objetivo mas «corto» y viable, asumo para aspirar a no tener vuelta atras y de no ser realmente el ultimo dia puedan ver el resultado de animarse a las cosas, de como dice santiago, «salir de la zona de confort».

  15. Un gusto recibir esta reflexión. En mi profesión (Médico) veo a diario la «práctica» a ultranza del famoso «Carpe Diem» o su ignorancia más rotunda.

    Por ejemplo estoy cansado de ver a supuestos «adultos» que pisan los 50 y que hasta ahora habían vivido «cada día como si fuera el último y como si el futuro no existiera», comienzan a descubrir que la juventud no era eterna como creían y que todo aquello que pensaban jamás les iba a suceder -como enfermarse por fumar 2 cajillas de cigarros por día- les golpea la puerta.

    En el otro extremo, demasiadas personas literalmente sufren por todo aquello sobre lo que no tiene control o por su pasado y también literalmente «el día a día» les pasa por el costado porque en realidad están viviendo sumergidas en el pasado o angustiadas por un futuro incierto.

    Al no darse cuenta que en realidad el poder de cambiar tanto el pasado como el futuro está en el «aquí y ahora», no son capaces de disfrutar de nada o de hacer algo para cambiar aquello que no les gusta de su presente situación.

    Por lo general cuando logran hacerlo, el pasado se supera pero esa experiencia pasada potencia el presente y al comenzar a disfrutar el día a día, el futuro cobra un nuevo «sentido» que también potencia al presente y los libera de la tensión que generan estos opuestos complementarios.

    Hay un libro que en mi opinión lograr armonizar pasado, presente y futuro como pocos, se trata de «El Poder del Ahora» de Eckart Tolle, una joya que receto con frecuencia y a ayudado a mucha gente a encontrar el equilibrio buscado.

    Saludos

    Nuevamente como ya se mencionó, el equilibrio es lo realmente importante

  16. Muy buena reflexion…a veces repetimos frases o cosas que suenan lindas sin analizarlas en profundidad y es muy cierto eso que decis de vivir cada dia como si fuera el ultimo…es imposible y seria fatal!. de todos modos creo que la connotacion de fondo que tiene dicha frase tal vez mal armada, es que uno tiene que proponerse siempre estar feliz con lo que hace, no enrollarse con el dolor, el sufrimiento, la negatividad, y tratar de a pesar de los golpes de la vida, siempre hacer lo imposible por alcanzar nuestros sueños dia a dia, gota a gota y si la muerte te atrapa en mitad de camino, moriras feliz porque estabas luchando en el camino correcto. Yo siempre me pregunto: si hoy tuviera que morir hay algo que me arrepienta de no haber hecho: y mi respuesta: no, la verdad que no, ya que siempre hice lo que me dicto el corazon y a pesar que me queden aun mil cosas por hacer (por suerte!!!), no hay nada que haya podido hacer, que no n

  17. y se me escapo mal!!!! jajajaajajja. dedos veloces…mas que la mente!!!.
    decia que no hay nada que haya podido hacer que no haya hecho en el momento adecuado.
    Hay un ejercicio de no se cual libro de los millones que lei, que dice justamente que hagamos eso: cada noche preguntarnos si estamos conformes con lo que hicismos ese dia, y al otro dia al despertarnos, proponernos lo que queremos lograr asi sea solo estar positivo y al final del dia, el balance…
    En fin…es un tema largo, y amplio, pero muy real!.

    Suerte!!

    Luli

  18. Siempre pienso que si me dijeran que me queda un día más de vida, haría exactamente lo mismo que hago casi todos los días:
    1) despertarme al lado de la persona que amo, o sea, el responsable de este post y de tantas otras cosas lindas de mi vida;
    2) contemplar a mis niños cuando duermen (y sorprenderme de lo grandes que están!) y taparlos… Y, a los pocos minutos, despertarlos para ir al cole. Si puedo llevarlos e ir de la manito con ellos en el camino;
    3) trabajar en lo que me apasiona: escuchar a mis pacientes y apostar a que ese encuentro tan particular pueda significar mucho en la vida de ellos y en la mía!;
    4) demostrarle a los que me rodean (familia, amigos, todos) cuán importantes son para mí. Y llenar mi día de pequeños gestos hacia los otros (conocidos y desconocidos) de respeto, consideración, agradecimiento, admiración, etc., etc.

    Ya sé tengo mucha suerte!. Ojalá me dure para siempre y se la pueda contagiar a los demás!.
    Felicitaciones a todos por los buenos comentarios que siempre se pueden leer en este blog!-

    1. En la vida no es el 100% suerte. 50% suerte, 50% cosecha de la siembra. la cosecha tarde o temprano la recibimos todos (buena o mala segun siembra) la suerte…esa depende al azar y del destino. Que te dure no depende del azar, depende de tu inteligencia para valorarla cada dia de tu vida y aprender lo debas aprender. A muchos se les va la famosa suerte, porque se les dio todo y no supieron aprender nada..entonces la vida te pega un reves para que aprendas y valores lo que tenias.
      Pero tu actitud de agradecimiento y de querer comaprtirla, hacen pensar que la suerte te durara para siempre ya que son dos de los valores necesarios para que ello ocurra.
      No cambies nunca porque tu humildad y tu valoracion por la vida te llevaran siempre mas lejos y a estar mejor.

      Un abrazo, gracias, y exitos!!!

  19. Es muy interesante redefinir el carpe diem. Me parece acertado cambiar el concepto de vivir el dia como si fuera el ultimo, yo diria tambien vivir esta vida como si fuera la ultima. Y obviamente esto no me habilita para que haga de mi vida una montaña rusa de sensaciones y aceleres, pero muchas veces pienso (más en mi condicion de atea) que lo años que me toquen son la porción mínima de eternidad que me corresponde, y no puedo pasar por esta vida sin darme cuenta. Cierro con una frase del genial Groucho Marx: »Si sigues cumpliendo años acabarás muriendote», creo que es aplicable: los cumpleaños nos acercan cada vez mas al final, sin embargo hay que vivirlos y disfrutarlos a cada uno de ellos, sin importarnos la posibilidad de que sean los ultimos. Saludos !

  20. Muy lúcido este post, Santi. Creo que has dado en el clavo respecto de la relativa ingenuidad de sacar la carta «carpe diem» ante cada suceso que nos haga pensar en la finitud de la vida y la poca importancia de los desarreglos cotidianos. Creo que parte de que sea casi necesario recurrir a frases bellas como esa es que no estamos logrando ese «algo» que nos hace sentir vivos en lugar de solo existir. Algo así como que hemos armado una vida que, por no terminar de darnos el sentido que esperábamos, nos hace evidente que nuestros días están más llenos de minutos que de sensaciones.
    Por otro lado, y sin menospreciar la hermosa poesía de Horacio, vivimos en épocas radicalmente diferentes. A veces, siento que se recurre fácilmente a la falacia de trasladar pensamientos de una época a otra e intentar aplicarlos de igual manera. Esto no siempre funciona, y es la causa de tanta frase hecha abusada hasta el cansancio sin lograr que muestre su fruto escondido. La vida moderna no es -en absoluto- sencilla, y cosas tales como «aprovechar el día» pueden resultar mucho más bonitas que practicables.

    Todo lo que surge de una expresión tan pequeña como esta puede alimentar una larga reflexión, y más de uno podría cambiar su vida luego de dedicarle suficiente tiempo.

  21. Cabe preguntarse , tal cual Aquiles , si preferimos una vida corta y con gloria o larga y sin gloria .
    Para eso lucho dia a dia , para no lesionar ´´mi tendon de Aquiles´´ , siempre tan dispuesto a quebrarse ante muchas situaciones
    Creo que como objetivo de vida , deberiamos de plantearnos una meta utopica , no como un fin en si mismo , pero que nos ayude para el camino a seguir .
    Por mi parte , me gustaria dejar una huella en este mundo , que genere valor para mi y para todos los seres humanos …

    que los dioses del olimpo se apiaden de mi !!

  22. No hay ensayo general cada dia es debut y despedida.
    Todo aquel que arriesga en la vida obtiene su recompensa….
    DOGGING CONTRASEÑA: RECOMPENSA

  23. El concepto de «vivir cada día como si fuera el último» no tiene que ver con que se hace, sino como se hace. Se refiere a la intensidad, a vivir el aquí y ahora. Calidad. Es un concepto madre de la filosofía oriental. Santiago, me parece que tu interpretación literal es incompleta. Te recomiendo que leas a Krishnamurti que explica perfectamente en que consiste el «vivir conciente». Saludos

    1. Creo que estas mal interpretando las palabras de Santiago
      Para mi queda claro que lo que el busca es tal cual lo dice ´´literalmente´´ …es ´´promover una discusion filosofica acerca del tema ´´ y muy por el contrario , creo que esta compartiendo tu punto de vista .

      pd .Perdon Santi , si el que mal interpreto tu vision soy yo !

  24. Para la época en la que está ambientada La Sociedad de los Poetas…, fines de los ’50, el mensaje de «desestructurar» es positivo.
    Hoy en día, cuando todas las formas están ya recontra desestructurado, lo revolucionario es buscar la excelencia y el esfuerzo (no de formas sino de contenidos).

  25. La frase «aprovecha el día como si fuera el último» es muy buena, no creo que deba interpretarse tan literalmente, y me parece que delirás filosóficamente un poco al pedo.

  26. No coincido Santi 🙂

    En realidad creo que el carpe diem, vivir cada día como el ultimo, vivir siempre el HOY, etc… son expresiones correctas, no porque ignoren el largo plazo (no lo hacen a mi criterio), sino porque tratan de decirte «no te olvides por pensar en el largo plazo, de disfrutar el día de hoy».

    Justamente como alguien dijo, disfrutar el proceso…eso es carpe diem! Carpe diem no te dice «no hagas planes para el futuro», te dice, «hagas lo que hagas, no te olvides de ser feliz HOY».

    Y es muy útil de cara a que solemos posponer para mañana el momento de ser felices. «Sere feliz cuando logre tener mi propia casa», «Seré feliz cuando consiga ese trabajo o logre ese emprendimiento»… está muy relacionado a un concepto que alguien denominó algo así como «la trampa de la esperanza» (recomiendo altamente el libro «La felicidad desesperadamente» de filósofo francés André Comte-Sponville, es breve y muy claro para describir este concepto).

    En resumen, les deseo de todo corazón que puedan vivir plenamente y felices el único momento que realmente existe, HOY 🙂

    1. Desde un punto de vista meramente físico, lo único que existe es el hoy; el pasado y el futuro son constructos mentales relativamente útiles y nada más.

      Se nos pasa la vida acomodando todo para el «día de mañana» tener una existencia plena y disfrutable…

  27. Santi: adhiero a tu análisis de como se lo posiciona al Carpe Diem. Y creo que es erróneo como ya lo han manifestado otros «cólegas comenteriles» aquí 🙂 Me parece que se tiende a «occidentalizar» el concepto, y justamente llevarlo al extremo que vos decís: en vez de ser una idea que te «frene el frenesí» en que vivimos, que «pare la pelota», tiende a acelerarte más; y creo nada más en contra de lo que plantea el Carpe Diem. De todas formas, me encanta el concepto que creaste con Carpe Vitam!
    Ahora profundizando un poco en el tema en cuestión que se quiere tratar, que es nada menos en como vivir la vida, creo que no hay una receta infalible, no? Yo, personalmente enfilo más para el lado que plantea Andrés Schuschny (me dejo las manos calientes de aplaudir tu comentario). Creo que la conexión cabal con uno mismo es lo que te permite vivir la vida de la forma en que quieres vivirla. Eso es lo que te genera la felicidad -que será distinta para cada quién-. El tema es no poder saber lo que te hace feliz y vivir preguntándotelo cada día. Me parece una trampa muy cruel el tema del futuro y el «mandato» de ir pensando en lo que «tenés» que ir haciendo para poder obtener «eso» mañana. No sé si atenta con tu largo plazo o no. Quizás dependa ese trabajo de hoy o diario de lo que busques obtener mañana y de como lo vayas haciendo. El camino sin dudas es lo que se disfruta buscando «la meta». Quizás podríamos decir que la vida debiera ser una utopía, un camino que se disfruta y con el que nunca se llega al destino -o al final de cuentas sí, cuando esto se termina-. Pero se termina?

  28. Excelente reflexión. A veces la lucha por sentir esa libertad que nos obliga a correr sin rumbo, se vuelve aliada del ritmo alocado… Y ya se pierde el límite entre esfuerzo por una meta y carrera descontrolada y sin fin. Cierto es que no es nada fácil encontrar ese equilibrio, como dice el Post, es UN ARTE…

    Tal vez, algo nada fácil, es marca algún límite, no muy nítido, pero si más o menos delineado, como «meta» y tener el coraje de asumir, al momento de la cuenta regresiva, si ese límite se alcanzó o no, y saber detenerse ahí, y disfrutar lo alcanzado, meditar lo no logrado, aprender, reflexionar, pero encontrar el disfrute a lo largo de ese camino… eso si, lo duro es saber convivir con ese ´límite autoimpuesto…
    No negación, sino, por otro lado, asumir lo que generamos, lo alcanzado (siempre que se comienza una carrera por una meta se logra algo) y disfrutarlo.

  29. Espectacular reflexión Santiago!

    La vida para mí no termina nunca.
    Y si, un una de esas, llegara a terminarse… no creo que me entere.

    Voy a salir a buscar un VideoClub a ver si encuentro la película.

  30. È importante e necessário que tenhamos os pés nos chão. Mas que seria de nós sem os sonhos?.Como deixar de sonhar e imaginar que o tão e desejado projeto ou o amor encantado ainda poderá vir? ?? Adorei este post e a forma
    gostosa do autor escrever! Parabéns.

  31. Qué buen post!! Nunca había pensado en el Carpe Diem desde este punto de vista, ni en el balance Meaningful – Fulfilling. Me abrió la cabeza, Gracias y Carpe Vitam!!!

  32. Por alguna razón, un año después leo este post y aunque tardío dejo mi comentario igual.

    Hace muchos años tocaron el timbre de mi casa unas personas que iban anunciando la proximidad del fin del mundo; les agradecí la información y les dije que estaba conforme con vida y que no cambiaría nada aunque el mundo se terminara al día siguiente.
    Hoy pienso exactamente lo mismo, aunque no podría contarles la cantidad de cosas que cambiaron en mi vida desde aquel encuentro hasta hoy.
    Supongo que de eso se trata vivir: estar conforme con lo que hacemos y cambiar el rumbo cuando sea necesario.

    Por mi parte me resulta imposible pensar cada día como si fuera el último; no tengo la certeza que mañana estaré viva, pero tampoco lo contrario (ambas alternativas gozan de la misma incertidumbre).

    Coincido con Andrés Schuschny que es importante encontrar al Ser de cada uno, o tal vez como diría Ken Robinson «El Elemento».

    Aprovecho a dejarles un link de TED donde Dan Gilbert prengunta ¿Por qué somos felices? http://www.ted.com/talks/lang/eng/dan_gilbert_asks_why_are_we_happy.html

    Saludos.

  33. Profunda y hermosa tu reflexión. Para mi, Carpe Diem significa lo que se ve en la película «El día de la marmota» (una con Bill Murray) Este tipo, que obligado a «empezar de cero» y «terminar en cero» cada día, después de pasar por todos los estados de ánimo finalmente aprende a entregarse a lo que esta viviendo en cada momento y así logra encontrar una especie de calma en el absurdo que le toca vivir. Luego, cuando ha comenzado a vivir su vida de forma completa y se convierte en una versión más perfecta de sí mismo, el hechizo desaparece. Creo que a grandes razgos habemos dos clases de personas, los que estamos inclinados a pensar en términos de eternidad y los que estan del otro lado y sienten todo como «efímero». Al principio veía a los del otro extremo como «irresponsables»e «inmaduros», estaba orgullosa de ser la hormiga y no la cigarra del cuento. Con los años empecé a entender que podemos utilizar los dos puntos de vista para «equilibrar» nuestra vida cuando algo anda mal. Así, cuando estoy demasiado angustiada por cosas que no puedo arreglar comienzo a pensar en lo eterno y trato de recordar que tal vez, solo tal vez, en la vida haya mucho más de lo que he conocido hasta ahora y deba dejarme de sufrir por pequeñas mezquindades. Luego, cuando ando como loca de aqui para allá persiguiendo un «sueño» dejo que mi hijo me tire de los pelos y me obligue a entregarme a unos minutos de ocio nada productivos ni perspectivos, arrastrando hot wheels por toda la casa (¡qué dolor!, el tiempo pasa…)
    Carpe Diem y Carpe Vitam, que no sean una obligación más. Usémoslos como «ayuda memoria de uso sutil».

    Beso!
    PAOLA

  34. Hola gente, he leído los dos artículos y no me parece una postura opuesta, más bien la veo compelmentaria o contextualizada diferente.
    Para hablar de la película, me parece oportuno recordar que el profesor le hablaba a un montón de chicos, en una época determinada. Ese es un contexto determinado. Y los chicos a los 18 años tienden a creer que los días no se les van a terminar nunca.
    Luego, coincido en que los extremos aportan poco. Por otro lado, no creo que vivir al límite sea una forma de aprovechar el día.
    En mi caso personal, juzgo que el hecho de postergar me hace pagar precios altos y por eso me ayuda la idea de Carpe Diem, aunque Carpe Vita no está nada mal.

  35. Excelente post Santiago. Totalmente de acuerdo. Por suerte la muerte es algo que me tiene sin cuidado. Amo la vida y entiendo que necesariamente para que exista una debe existir la otra. Qué aburrida debe ser la vida sabiendo que no se termina.

    @guardiandelzoo

  36. «Carpe momentum»
    Bueno interesante tema, llego buscando mayor informacion sobre la pelicula «El Dia de la Marmota» que me fascina y heremos pronto un Cine Foro, por ASOPRANA…
    les diria hermanos que lo que se nos escapa es el momento, la puerta es el instante, lo unico es este momento, respira y logra vivenciarlo al máximo, no hay nada que se asimile mas a la eternidad que este momento(UCDM) por tanto soy pleno completo en este momento, escribo sin recordar solo fluyendo, pues al tratar de pensar voy a mis memorias que son el pasado y alli se me escapa de nuevo este precioso momento, escucho algunos pajaritos en el jardin, los niños que juegan en alguna calle lejana, el sonido de las teclas al escribir mi respiracion vuelve a respirar…eso esto lo que simepre tendras el INSTANTE entonces aprovechalo sintiendolo no pensandolo, hay plenitud y termina cuando quieres pensar en esto o en lo otro en el dia o en el mas alla de dia…No! solo es este ahora quedare a vivir ente pequeño pero eterno instante…!»Carpe momentum»!

    1. «El Dia de la Marmota», cada vez que la veo me aporta algo distinto, por eso la vuelvo a ver, porque siempre me aporta cosas nuevas, para vos de que significa el tema de la pelicula?

  37. A mi me encanta la idea de Paulo Cohelo que pretende escribir en su lapida «Murio mientras vivia».

    Hay mucha gente que se muere antes de morir.

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