02-10-2008

La sensación de volar, aunque sea a baja altura, es única. Pero el verdadero desafío (y placer) es poder volar alto.

La mañana siguiente a mi primer despegue, fuimos directo a una montaña mucho más alta que la anterior. Ya no era tiempo de preparativos ni de despegues de prueba: había llegado el momento de volar.

El valle se veía lejano abajo. Una vez más, elegí no ser el primero, pero enseguida llegó mi turno. Confiado en la capacidad de volar de mi parapente, corrí hacia la ladera.

Y en este vuelo aprendí una lección que jamás hubiera imaginado: en vez de asustarte, la altura te tranquiliza! Es el piso el que es peligroso, no el aire. Volando suavemente, a unos 20 metros de altura, experimenté una paz que no se compara a nada más que haya experimentado.

La semejanza con el Entrepreneurship en este caso es obvia: contrariamente a lo que la intuición haría suponer, es más fácil volar alto que bajo. Es más fácil armar una gran empresa que un pequeño comercio. Porque la amenaza es pegársela contra el piso. Cuanto más alto, mejor.

Entonces la pregunta no pasa por por qué apuntar alto, sino cómo hacerlo. Aquí siguen algunas ideas al respecto:

1) Apuntar alto: Esto puede sonar a verdad de perogrullo, pero la primera condición para volar alto es apuntar alto. La mayoría de las empresas que llegaron a ser grandes lo lograron porque sus fundadores quisieron que sean grandes. No estoy diciendo acá, a lo Paulo Coelho, que con desearlo basta para que ocurra. Sí digo que si el emprendedor no quiere con pasión que su empresa sea grande, difícilmente lo sea.

2) Hacer las cosas escalables: Muchas veces en las etapas tempranas de una empresa, la solución «casera» que puede sacarnos del paso es tentadora. Pero desde el diseño inicial en un plan de negocios hasta los pasos concretos del startup, todas las decisiones que tomamos tienen que pasar por «el filtro de la escalabilidad»: estos procesos que estoy armando, sirven para cuando tenga 5 veces el volumen de hoy? Y 20 veces? A veces la respuesta temporaria puede ser no, pero eso basta como luz amarilla de que estamos conviviendo a sabiendas con un problema.

3) Saber qué significa ‘alto’ para cada uno: No hay una definición unívoca de qué significa ‘alto’. Para cada persona hay una altura diferente que es baja y confortable y otra que nos intimida. De lo que se trata es de apuntar arriba. De salir de la zona de comfort, tolerando la incertidumbre de exponernos a la altitud.

4) Doblar te hace perder altura: En el parapente, cada vez que doblás, perdés altura. En los negocios también. Y sin embargo, a veces hay que doblar! Es fundamental en este camino, saber cuándo hay que mantener el rumbo sin asustarse y cuál es el momento de sacrificar algunos metros de altura para corregir la dirección y no dar de lleno contra una línea de alta tensión.

5) Saber delegar: El que vuela es el parapente, no vos! Es mejor dejarle la sustentación a él y limitarte a ir colgado manejando los comandos que esperar hacer todo vos, hasta lo que le toca a él. En el mundo del emprendimienton está lleno de empresas que son tan grandes (o mejor dicho, tan pequeñas) como su fundador. No importa cuan talentodo sea, toda empresa que tenga la escala de su fundador es pequeña. Aprender que el secreto es atraer a otros y darles autonomía y responsabilidad es central a poder volar alto.

En el post final de esta serie, en un par de días, nos meteremos entre las nubes.

Foto: Ilumenari

13 Comentarios

  1. Siempre pense que una empresa debe necesitarte para triunfar, no para funcionar.
    Si no podes dejar la oficina por unos dias, hay algo que anda mal.
    Pero bueno lo mas importante de todo esto, es que Santi como tantos por mas que fue a volar en parapente, en algun momento penso que no podia hacerlo o que no podia hacerlo sin un tutor, y si SE PUEDE.

  2. Post No.3 nuevamente excelente.
    Sin duda lo que acotas de ver hacia lo alto es un punto de buscar un diferencial singular, es toda una estrategia. Me pregunto si despues de que un emprendimiento comienza a tener exito si todavia esta energia de pensar en alto continua, lo pregunto por la alta mortalidad de los emprendimientos despues de una par de años de fundados.
    Me recordo algo que lei de Prahalad y Hammel sobre como los managers ven el futuro, y mencionaban atraves de su ley 40-30-20 que muchos directores comienzan a pensar solo en la eficiencia operativa o acciones idones, pero se dejaba de lado el foresight o algo que Porter nos llama a nunca dejar la estrategia. Creo entender que el exito de Officenet seguramente fue que Bilinkis y Freire siempre pensaron en alto, pero siempre y continuan en ese orden!!!

  3. Voy a escribir algo en un post la semana que viene para que lo vea la mayoría de los lectores, pero mientras tanto, noten que cambié hoy el sistema de comentarios y ahora los que quieran ver qué respuestas hay a lo que escriben pueden ir arriba a «Options» y suscribirse a que les lleguen los comentarios que se hagan después como un rss… Varias personas me mencionaron que les gustaba ir periódicamente a mirar eso, así que traté de hacerlo más fácil.

    Ahora me falta que se pueda suscribirse por mail.

  4. Fascinantes descripciones y analogías. Y la historia es genial. Estaba esperando a que se termine la serie para comentar, pero no me aguanté!. Gracias por motivar así.

  5. Santiago,
    Excelente Post!

    Comparto una pequeña anécdota:

    Una vez me respondió un muy buen vendedor, luego de preguntarle cual era su objetivo de ventas: «Gabriel, no me pongas techo!, es cielo es el límite». (comparto!)

    Abrazo.
    Gabriel

  6. Estoy muy de acuerdo con todos los puntos.
    En especial, en lo que dijiste en «4) Doblar te hace perder altura: En el parapente, cada vez que doblás, perdés altura. En los negocios también. Y sin embargo, a veces hay que doblar!»
    También hay que «saber cuando» doblar. Eso me parece que termina de cerrar perfecto porque hay que tener en cuenta que un proyecto que empieza en A puede terminar en A+B+C o en Z (es decir, completamente distinto a lo que habías proyectado pero, como se presentó alguna otra oportunidad la aprovechaste).
    Un abrazo

  7. Empece leyendo el de las nubes oscuras….que me vino al dedillo!
    y de ahi pase a este de volar alto.
    La verdad que desde que lei a los 18 anos «Pasion entrepreneur» de Gerardo Saporosi, o todo lo que me hizo leer Eduardo Kastika despues, que no volvi a este tipo de textos o notas.
    GRACIAS…y con tu permiso, a la seccion ABM de por lo menos alguna de las paginas web que tiene mi empresa cada tanto le voy a tirar algunas lineas relacionadas con mi experiencia entrepreneur: vocacion creativa, mucho estudio, interesante experiencia de vida, una vida personal plena y lo que significa ser una emprendedora mujer joven, esposa y madres de bebes…

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